The Woof; el grooming que le faltaba a Santurce

Los perritos y perritas de Santurce y áreas limítrofes tienes su nuevo espacio para acicalarse… ¡y qué espacio! Deja que Lola, Noah, Cano, Lula, Benito, Talúa, Coco y todos esos perri hijos que tanto amor nos dan lo vean. ¡Tiene un área para compartir y jugar con otros perros sin jaulas! “Woof Woof” (colitas felices).

Hace un tiempo cuando ví que La Paz Skate Shop había cerrado sus puertas en ese mismo local, me puse triste pues una comunidad de skaters se reunía ahí diariamente, y entre los carros y las luces rojas, utilizaban la calle para hacer sus maniobras. Era lindo ver esta comunidad. Pero, como todo se transforma, espero que anden en otro lugar impactando a los jóvenes a través de la patineta.

Pero, esa tristeza es cosa del pasado pues para mi sorpresa ese espacio tiene una nueva dueña, que de seguro, creará comunidad. Nada más y nada menos que The Woof Dog Grooming, el grooming que anda haciendo ruido en las redes por la energía y espontaneidad de su creadora Jarrette Soto, una amante de vivir al máximo, seguir sus sueños, viajar y tirarse de pecho.

Este pasado lunes, y ante este escenario que vivimos tras la covid-19, The Woof abrió sus puertas. En tiempos inciertos donde muchos negocios cierran, otros abren a nuevas oportunidades, otros se lanzan confiados en que mañana será mejor y que las posibilidades son infinitas. Conversé con Jarrette sobre esta nueva etapa, sobre eso de que con cada crisis su proyecto asciende. Cómo las crisis se convierte en empujones para lo próximo. 

Jarrette y su perro Balto.

Aseguras que trabajas mejor desde las crisis. ¿Cómo es eso? 

Sí. Haciendo una introspección, realmente si no hubiese sido porque me quedé sin trabajo en algún momento, porque tuve mil momentos de frustración, porque pensaba que la última entrevista de trabajo que tuve del puesto -que pensé era el ideal-, no se me dio. Fueron momentos en los que me cuestionaba, ¿para qué soy útil? 

Cuando llegó María y me quedo sin trabajo y me tocó irme fuera porque no tenía cómo pagar mi apartamento. Fue difícil vivir allá pues extrañaba todo de acá, mi familia, mis amigos, mi entorno, todo. Es ahí cuando me dije: “Voy regresar a Puerto Rico pero esta vez con un plan. Voy a intentar algunas cosas que dejé a mitad hace tiempo y que son cosas que me interesan”. Regresé con lo que me quedaba de ahorro y me dije, “esto lo voy a invertir”, y me tiré de pecho. 

Luego de esto, Jarrette decidió certificarse como groomer y comenzó dando servicios desde su casa. De ahí surgió la oportunidad de un espacio local. Con esto vino más clientes, más responsabilidad y así el proyecto se mantuvo y evolucionó. Llegaron los terremotos y al no poder atender por la falta de electricidad y agua, buscó la manera de mantener activo el proyecto y decide gestionar ayudas para los perros del área sur. “Intento que el proyecto esté envuelto en las cosas que hago. Es un balance que siempre busco. Si me voy de viaje, quiero que el proyecto se mantenga vivo. Incluyo experiencias de grooming. Lo hice en Cuba y en Uruguay y quiero seguir haciéndolo”.

Luego tuvo problemas con el lugar que rentaba, así que ya era hora de moverse. Tuvo que cancelar el espacio y con eso, llegó la pandemia. Jarrette está clara que gracias a su enfoque, de decir y asumir “Lo voy hacer comoquiera, no sé cómo, pero The Woof va a continuar”, es lo que la mantuvo activa y productiva durante la Cuarentena.

Equipo de trabajo The Woof.

“La Cuarentena representó un receso, una pausa; tiempo para pensar, ¿estás segura de que esto es lo que quieres hacer? Recargué energía. Para mí fue importante poder ver el proceso de preparación de este espacio. Estoy lista para esta nueva etapa”. 

Santurce es bien especial. 

The Woof está ubicado en el 1664 de la Ave, Ponce de León, cerca de Abracadabra Counter Café. Para Jarrette, Santurce es parte de proceso. “Desde que soy chiquita, vengo a Santurce. Así como he visto el desarrollo de The Woof, he vivido el desarrollo de Santurce. Y me encanta hacer esto aquí. Me ha dado la oportunidad de conectar con el barrio. Es lindo vivir en un barrio donde la gente te saluda; siento un apoyo increíble”.

Además, el escenario artístico, musical y teatral, cómo se desarrolla la vida aquí y la vibra que emana esta comunidad es algo que se siente y me trabaja. Este nicho es al que quiero aportar. Quiero hablar con los vecinos empresarios, ver de qué manera nos apoyamos. Lo que me encanta de Santurce es que es un lugar donde sales y encuentras de todo, correo, banco, cine, hospital, imprenta, cafés, farmacia… y faltaba el grooming … y ¡boom! aquí estamos. ¡A crecer!